Uno de los principales problemas para comer saludablemente es la falta de tiempo. Las obligaciones diarias pueden hacer que no tengas ganas de cocinar cuando llegues a casa. La carga en el trabajo o no tener tiempo para el almuerzo también te puede ocasionar la falta de algunas comidas durante el día.
Aquí te daremos algunos consejos para ayudarte a comer bien, incluso no teniendo tiempo para ello.
- Asegúrate un desayuno saludable
Por ahora, nadie dice que saltarse el desayuno sea algo perjudicial. Es más, recientes estudios dicen que el hecho de perder peso no depende de si desayunas o no.
No obstante, aunque no exista una opinión común sobre los beneficios de desayunar, es cierto que si cuentas con poco tiempo a lo largo del día para poder cocinar y comer de manera saludable, lo que menos has de hacer es saltarte la primera comida del día.
Tarde temprano el hambre aparecerá y el apetito te llegue antes de la hora de comer debido a la cantidad de horas que llevas sin ingerir ningún alimento. Por lo que, acabarás picando cualquier cosa de la máquina expendedora que haya en tu puesto de trabajo, siendo estos, poco saludables.
La mejor opción de desayuno podría ser mezclar frutas con un yogur, un poco de canela y un puñado de frutos secos, por su gran aporte de nutrientes y su fácil elaboración.
Si no dispones de nada de tiempo, si quiera para tomar el desayuno tranquilo en casa, prueba a prepararte una macedonia de frutas casera y llévatela al trabajo.
- Llena la despensa de alimentos rápidos de elaborar
Como bien comentamos anteriormente, puedes hacer buen acopio de tuppers y prepararlos la noche anterior si no puedes entretenerte en cocinar para llevártelo la misma mañana.
Hay muchos alimentos que tienen una preparación muy rápida y sencilla como pueden ser:
– Las ensaladas variadas
Con las ensaladas solo tendrás que abrir una bolsa de tu lechuga favorita, de las que ya vienen lavadas y listas para consumir. Solo faltaría añadirle los ingredientes que más te gusten, desde tomate, pimiento, zanahoria, pepino, o incluso algunas conservas como espárragos, maíz dulce, aceitunas o anchoas. También puedes añadirle taquitos de queso feta, bolas de mozzarella, surimi o huevos duro. Puedes ponerlo lo que más te guste, incluso si por casa te queda un resto de pollo asado, puedes desmenuzar un poco de poco en la ensalada.
– Sopas y cremas
En el mercado existen infinidad de marcas de cremas de verduras, cremas de hortalizas, cremas de setas ya preparadas para comer. Basta solo con abrir el recipiente, calentarlo y servirlo.
– Arroces y quinoa
¿Sabes que hay arroces que se preparan en 5 minutos de cocción?
Si aún así 5 minutos te parecen demasiado, puedes usar los vasitos de arroz, que solo con 1 minuto de microondas, puedes comerlos. Hay variedades como el arroz redondo, arroz basmati, arroz integral con o sin verduras, y arroz integral con quinoa. Puedes añadir un poco de aceite de oliva y sal, o un poco de tomate y queso. Un entrante o cena perfecta, de manera súper rápida.
– Carnes y pescados
No se tarda casi nada en preparar unos filetes de pollo a la parrilla. Lo mismo que hacer un pescado a la plancha. Incluso si tienes una plancha eléctrica de esas portátiles, te las puedes llevar a la mesa mientras te comes el primer plato y así vas preparando lo siguiente.
– Comida preparada
Por supuesto, si no se tiene tiempo para cocina siempre se puede comer comida elaborada o precocinada porque hay opciones para todos los gustos. “Algunas ideas interesantes de comida precocinada son croquetas, empanadas, lasaña o wraps. Lo mejor de estos productos es que tan sólo hay que calentarlos para poder disfrutar de ellos”, explican desde Redondo Charcutería Carnicería, carnicería de Valladolid que cuenta con alimentos precocinados en su catálogo.
– Huevos y tortillas
¿Qué hay mejor y más rápido que una buena tortilla francesa? Puedes añadirle sabor con quesos, jamón, atún o pimientos asados. Es suficiente con tener un ingrediente por casa que no necesite de cocción previa.
Si por lo contrario, te apetece una tortilla de patatas, prueba a hacerla con chips, y añádele un poco de cebolla frita.
– Bocadillos y sándwiches
Hacer un bocadillo, la comida más rápida que vas a leer hoy. Abres el pan, rellenas con ingredientes y listo. Bien es cierto que no puedes abusar de este tipo de comidas, pero para salir del paso en ocasiones puntuales, es una buena solución.
También hay bocadillos saludables. Basta con ponerle unas hojas de lechuga, tomate en rodajas, salmón, aguacate…
Estas han sido algunas de las mejores opciones para comer cuando no dispones de tiempo para cocinar. Has podido comprobar que comer rápido no siempre es sinónimo de comer mal. Hay muchas formas de preparar comidas sanas con el tiempo justo. Por lo tanto, quédate con las recetas que te hemos mostrado y elige tu favorita para empezar a ponerlas en marcha.