Roberto Suárez - Actualízate

Denuncias por responsabilidad patrimonial para reducir accidentes

En España tenemos todo tipo de ciudades. Las hay con una enorme calidad de vida y otras en las que esa calidad ha descendido o en las que directamente no existe. La verdad es que somos uno de los países que presenta una amalgama de ciudades de lo más variopinta. Aunque haya pocos kilómetros de diferencia, la diferencia en el día a día entre una ciudad y otra puede llegar a ser brutal. Y no cabe la menor duda de que esa diferencia se termina notando mucho, demasiado en algunas ocasiones.

En una información publicada en la página web del diario 20 Minutos se realiza una clasificación de 15 grandes ciudades españolas ordenadas de mayor a menor calidad de vida.

  • La primera es Vigo se coloca en lo más alto de este ranking tras sumar un total de 70 puntos para la OCU.
  • Zaragoza, Bilbao, Valladolid y Córdoba ocupan una segunda fila de ciudades que cuentan con 69 y 68 puntos. Los habitantes de estas ciudades tienen motivos para estar satisfechos.
  • Málaga, Valencia, Gijón o Alicante también se encuentran cerca de las posiciones de cabeza, sumando entre 65 y 67 puntos.
  • En el último tramo, fijaos a quienes encontramos: grandes ciudades como Sevilla, Barcelona o Madrid y urbes con mucho turismo, como lo son Palma o Las Palmas de Gran Canaria.

Son muchas las cosas que se tienen en cuenta a la hora de valorar si la calidad de vida en una ciudad es buena o no tan buena. Las comunicaciones, la amplitud de las viviendas, la calidad del aire, la calidad de los empleos y un sinfín de cuestiones tienen mucho que decir a la hora de valorar este campo. Pero también hay que tener en cuenta un aspecto tan básico como lo es el estado de las calles de dicha ciudad. Parece que no, pero esto tiene una influencia que puede tener una incidencia bastante poderosa sobre la vida y sobre la salud de las personas que viven en esa ciudad o que la visitan con frecuencia.

Y es que existen muchas maneras de padecer problemas como consecuencia de un mal cuidado de las calles de nuestra urbe. Vamos a poner varios ejemplo: ¿alguno de vosotros o vosotras nunca se ha caído por estar una baldosa de la acera levantada? ¿Alguna de las personas que estáis leyendo estas líneas nunca os habéis resbalado a causa de la existencia de baldosas que no garantizan precisamente el agarre de nuestros zapatos y zapatillas? La verdad es que son bastantes los motivos por los cuales podemos sufrir un percance en la vía pública. Y ese es el motivo de la existencia de la reclamación por responsabilidad patrimonial de la administración.

Son muchas las ciudades que deberían plantearse una mejora considerable de sus espacios públicos. Y una de las razones que lo evidencian es la cantidad de reclamaciones de responsabilidad patrimonial que reciben los ayuntamientos. Según los profesionales de Bufete Albanés, la ciudad de Madrid es una de las que más ha sufrido en este sentido. Y es que la capital de España es una de las ciudades que ve afectada en mayor medida su calidad de vida como consecuencia de los peligros que implica caminar por sus calles.

No es casualidad que Madrid estuviera entre las ciudades con peor calidad de vida según la noticia a la que más arriba hacíamos mención, la procedente del diario 20 Minutos, y el hecho de que Madrid tenga cada vez más denuncias y reclamaciones ligadas a la responsabilidad patrimonial de su administración. La capital de España tiene muchas cosas que mejorar y lo cierto es que confiamos en que, en este 2023, año electoral, los políticos pongan de su parte para conseguirlo.

Madrid no es la única ciudad en esta tesitura

La verdad es que no podemos decir que Madrid sea la única ciudad que presente problemas como de los que estamos hablando en este artículo. Barcelona también tiene que implementar mejoras cuanto antes en este sentido porque también está experimentando un aumento en el tipo de denuncias que estamos indicando. En general, las grandes ciudades tienen un amplio margen de mejora que harían bien en reducir. Ojalá que se consiga… y que se haga cuanto antes.

Es evidente que es necesario que haya voluntad política para resolver este tipo de cuestiones, pero no nos podemos limitar solo a eso. Los ciudadanos y las ciudadanas tenemos que presionar a través de mecanismos como esas denuncias por responsabilidad patrimonial para que se realicen las mejoras que consideramos oportunas. De lo contrario, esas mejoras tardarán en llegar o, directamente, no llegarán en ningún momento. Y eso no es precisamente lo que queremos ni lo que va a permitir que se viva mejor en la ciudad que habitamos.

 

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