Roberto Suárez - Actualízate

Las grúas para enfermos, más necesarias que nunca en hospitales y residencias de ancianos

Cuidar de las personas enfermas, con problemas de movilidad o discapacitadas es una de las mayores responsabilidades que se le deben atribuir a un país. Una institución que no cuide de este tipo de personas no merece considerarse un Estado ni mucho menos. Muchas veces se comparan las economías y los modos de vidas de países como lo son España y Estados Unidos, alabando las supuestas bonanzas de la economía del país americano y poniendo en entredicho todo lo que, en ese sentido, sucede en España. Sin embargo, nunca se tiene en consideración el hecho de que, en España, disponemos de una sanidad pública que, aunque ha perdido calidad, sigue cuidando de estas personas. En Estados Unidos, para eso hay que tener un seguro privado.

Además, hay que añadir que España es un país en el que, a causa de que se ha produciendo un envejecimiento de la población, la cantidad de problemas físicos que sufren las personas ha crecido de un modo bastante considerable en los últimos años. Por tanto, ofrecer una serie de servicios que estén destinados a poder tratar a todas esas personas que sufran algún problema físico o a garantizarles una vida mejor es algo que nunca podemos obviar y que debe estar en la agenda de los políticos de turno.

Fijaros en lo que apunta una noticia que fue publicada en la página web Geriatric Area: en España, hay un total de 2,63, millones de personas que sufren algún tipo de discapacidad. Es cierto que buena parte de ellas tiene una discapacidad mental y no física, pero las personas impedidas desde el plano físico siguen siendo muchas y hay que hacer todo lo posible por conseguir que se mejore todo lo que esté relacionado con su salud y los problemas por los cuales están discapacitadas.

Según otra noticia, en este caso publicada en la web de eldiario.es, hay 100.000 personas con movilidad reducida en España que no salen de casa por no tener ascensor o ayuda. ¿Os imagináis tener que permanecer en casa, sin salir para nada de ella, por culpa de un impedimento para el cual nadie os aporta una solución? Suena durísimo, pero más difícil tiene que ser padecerlo. Por eso, hay que incentivar desde el Estado todo lo que tenga que ver con la ayuda a este tipo de personas. Si no, hablaremos de algo inhumano.

Vivimos en el siglo XXI y es el momento de que ninguna persona que necesite ayuda en términos de movilidad se quede sin ella. Una de las grandes protagonistas de esto es la grúa para enfermos, que se ha convertido en una de las herramientas más demandadas sobre todo en residencias de ancianos y hospitales en función de los datos que manejan desde Cuidaria. Hablamos de uno de los elementos que ha hecho más fácil la vida de esas personas que necesitan obtener una manera más fácil de garantizar su movilidad y que también ha facilitado la tarea de todas esas personas cuyo principal cometido es ayudar a los enfermos o ancianos a que se puedan mover en las mejores condiciones posibles.

Los problemas de movilidad van a seguir existiendo

Por mucho que avance la medicina, lo más normal es que los problemas de movilidad de las personas se sigan produciendo a medida que avances las décadas. Por tanto, la sociedad tiene que permanecer preparada para hacer frente a todas las demandas que se puedan producir a este respecto. Si no fuera así, no podríamos seguir utilizando el concepto de Estado del Bienestar por motivos obvios. Que todas las personas tengan una vida digna es uno de los propósitos de ese modelo de Estado y no puede usarse esa denominación si no es para cumplir con ellos.

Es muy difícil o directamente imposible imaginar un futuro sin problemas físicos en las personas. Ojalá así fuera, pero si somos realistas, deberíamos olvidarnos de eso porque es imposible que, por algunas razones o por otras, el 100% de la población se pueda mover perfectamente. Lo que sí es posible es trabajar en soluciones eficaces para garantizar que las personas que sufren esos problemas tengan una manera de moverse y no tener que quedarse de manera obligada en casa, como comentábamos que pasa con nada más y nada menos que 100.000 personas solo en España.

Herramientas como las camas articuladas o las grúas para enfermos son maneras de acercarnos a ese gran objetivo. Sin duda, a día de hoy son la mejor manera de combatir esos problemas. De cara a los próximos años, es posible que aparezcan cosas mejores. Habrá que estar pendientes de cómo evoluciona esta clase de asuntos para seguir proporcionándole a la gente una vía para hacer posible una vida mejor.

 

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